Nadal y Djokovic sin problemas en Montecarlo

El español Rafael Nadal, segundo favorito, venció cómodamente al clasificado holandés Thiemo de Bakker, verdugo del argentino Eduardo Schwank, por 6-1 y 6-0 en menos de una hora de juego. El zurdo de Manacor capitalizó cinco de seis oportunidades de quiebre, y salvó las 3 ocasiones en las que su servicio estuvo en riesgo.

"Esperaba que fuera un encuentro más duro. Creo que he jugado bien, en un partido muy sólido, sin cometer demasiados errores, con buenos movimientos y buenas direcciones", dijo Nadal.

"Me gusta la atmósfera de este torneo, aquí sientes que estás en un club", añadió. "Es agradable jugar en grandes torneos, con grandes estadios, pero aquí estás en un club y eso es lo que hace este torneo tan diferente", comentó el español.

El próximo rival de Nadal, ganador de las últimas cinco ediciones de este torneo, será el alemán Michael Berrer, que eliminó al argentino Juan Mónaco, 14° preclasificado, por 6-4 y 6-4 en una hora y 41 minutos. Mónaco tuvo un muy bajo porcentaje de primeros servicios (39%) y se despidió del certamen, al igual que sus compatriotas Horacio Zeballos y Eduardo Schwank.

Por su parte, Djokovic, el máximo favorito, tuvo una impresionante presentación con un estadio repleto para ver el triunfo sobre el francés Florent Serra por 6-2 y 6-3 en una hora y 24 minutos de partido. Djokovic, finalista ante Nadal en 2009, se puso en ventaja 4-0 en el primer set, pero su servicio no estuvo tan efectivo y debió salvar nueve puntos de quiebre en total. Su superioridad se hizo evidente en el segundo set, donde selló la victoria.

Para Djokovic su debut en tierra estuvo lleno de dudas, a pesar de no ceder un solo set. "Hubo algunos momentos en el partido que fueron difíciles para mi", dijo el serbio. "Algunas cosas pueden mejorarse como mi saque y quizás algunos movimientos", añadió el actual número dos del mundo, que recientemente anunció la ruptura con su segundo entrenador, el estadounidense Todd Martin, quien trabajó mucho con mejorar su servicio.

"Es algo confuso y complicado", dijo Djokovic, "lo peor que puedes hacer es tener un banquillo con cosas técnicas diferentes, porque llegas a un punto que no sabes realmente qué hacer".

Ahora, el serbio repetirá la semifinal del año pasado ante el suizo y Stanislas Wawrinka, 13° preclasificado, que salvó los tres puntos de quiebre contra el letón Ernests Gulbis, número 44 del ránking, por 6-1 y 6-4 en una hora y 10 minutos de juego.